Una gestoría ayuda a particulares (autónomos) y empresas ofreciéndoles servicios de gestión a los que lo necesiten. La gestoría ayuda, primordialmente, a aspectos de la gestión administrativa, mientras que la asesoría suele ayudar o asesorar en temas financieros, laborales y fiscales.
El concepto de asesoría se diferencia al de gestoría en que se ofrecen servicios fiscales, financieros, contables y laborales, mientras que en la gestoría no. Hoy en día, el papel de las gestorías y asesorías suelen ser complementarios y ofrecer servicios conjuntos. El asesor está más inclinado en el asesoramiento personalizado de su cliente, mientras que la gestoría ayuda a cuestiones prácticas y tramitación de documentos de un cliente (ya sea autónomo o empresa).
¿Qué servicios ofrecen las gestorías?
- Servicios de contabilidad y facturación de negocio.
- Gestión para constituir un negocio.
- Tareas mediante el uso de software para gestorías.
- Servicios para ayudar a dar de alta y baja a los autónomos.
- Ayuda a los trámites laborales de las empresas: desde la contratación, hasta el alta o baja de la Seguridad Social, así como la gestión de las nóminas y despidos.
- Ayuda a dar presencia de la empresa o el autónomo ante las administraciones públicas.
- Informa y aconseja sobre las posibles ayudas y subvenciones que se pueden adquirir.
- Ayuda a la presentación de impuestos en la Administración pública fiscal (AGENCIA TRIBUTARIA ESPAÑOLA).
- Servicios adicionales: tramitación de herencias, multas de tráfico o personales, licencias de administración, etc..
